En el Capítulo 6 de mi libro “Cáncer: del miedo a la esperanza”, desde las páginas 28 a la 41 hago un análisis sobre el diagnóstico de una de las enfermedades más temidas en la humanidad. Lo hago desde mi experiencia de trabajo de 35 años como oncóloga, y desde el conocimiento que aporta la ciencia médica, la biología, la psicología y la filosofía. Menciono estas disciplinas pero hay muchas más, ya que la atención de un enfermo con cáncer es integral.
Pero para la etapa del diagnóstico intervienen en su mayoría médicos y técnicos de diferentes procedimientos profesionales que se aplican a personas con síntomas o signos sospechosos de cáncer. Análisis, tomografías, gammagrafías, endoscopías y biopsias son palabras que representan algunos de los muchos estudios que se le indican a una mujer con un bulto en la mama o a un señor que evacua el intestino con sangre.
El capítulo está dividido en cuatro etapas por las que transcurre el paciente a partir de uno o más síntomas, sometiéndose a estudios para alcanzar su diagnóstico y estadio final de la enfermedad. Este es el punto de partida del primer médico y luego del oncólogo, para diagramar la estrategia terapéutica específica que elige para tratarlo, teniendo en cuenta una variedad de razonamientos e interpretaciones que realiza junto a un equipo interdisciplinario.
Si usted tiene un familiar y sospecha que podría tener cáncer, este capítulo le ayudará a entender por qué el médico solicita tantos estudios y consultas con otros especialistas, para confirmar o descartar el diagnóstico final.
Si usted tiene síntomas de sangrado, dolor u otros que no se van o se agravan, o pérdida de peso importante sin hacer dieta, o tiene antecedentes familiares de cáncer, y consulta con un médico clínico, él será el primer profesional que tratará de determinar la gravedad o no de esos síntomas o signos que encuentre al revisarlo, y de definir su diagnóstico definitivo de cáncer a través de una biopsia o cirugía.
Le brindo algunos párrafos del capítulo, que desarrollo a fondo en el libro.
“… PRIMERA ETAPA: CONSULTA CON UN MÉDICO GENERAL
Generalmente una persona sana que empieza a sentir algún síntoma que no cede o empeora en el tiempo, concurre a un médico clínico o a un ginecólogo en el caso de síntomas femeninos más específicos. El colega construirá su historia clínica escuchando los síntomas que se refieren en la consulta, preguntando sobre sus hábitos, sus antecedentes familiares de cáncer y otras patologías benignas que pueda tener, y luego lo revisará exhaustivamente…”
”… Por eso es muy común que el primer médico que lo ve lo derive a uno a o a varios especialistas (cirujanos, endoscopistas, ginecólogos), para que continúen con su atención, lo que muchas veces se malinterpreta creyendo que es un incompetente y le hizo perder tiempo…”
“…SEGUNDA ETAPA: DIAGNÓSTICO DEFINITIVO DE CÁNCER Y DERIVACIÓN AL ONCÓLOGO
El médico especialista en cáncer es el oncólogo. Hay oncólogos clínicos, ginecólogos-oncólogos y cirujanos oncológicos…Los oncólogos clínicos tenemos la visión biológica global y la formación para determinar el pronóstico que oriente para establecer una estrategia oncológica específica. Tenemos una mirada analítica que permite ordenar los tratamientos en función del posible rendimiento terapéutico de cada línea elegida…”
“…Por eso su llegada al consultorio del oncólogo es un desafío sumamente estresante. Suelen llegar con una bolsa llena de estudios, con el informe de cáncer y con la incertidumbre a flor de piel, sobre todo porque no lo eligió sino que fue derivado por su médico de cabecera, especialista o, como muchas veces sucede, por la fría cartilla de la obra social….”
“…El oncólogo que lo atenderá por primera vez (algunas veces en soledad y otras veces rodeado de sus familiares) recibe personas angustiadas, algunas desconfiadas o enojadas con el sistema, pero seguramente todas confundidas acerca de lo que habría que hacer…”
“TERCERA ETAPA: PRIMERA CONSULTA ONCOLÓGICA Y PASOS A SEGUIR
El oncólogo evaluará una serie de aspectos para establecer el diagnóstico definitivo del cáncer y para elegir el tratamiento que le propondrá luego. Para ello se requiere de estos pasos a seguir:
1) Evaluar su estado general
2) Analizar el informe diagnóstico
3) Solicitar nuevos estudios complementarios e interconsultas
4) Establecer el estadio del cáncer
5) Identificar los factores pronósticos de la enfermedad
6) Observar y determinar su entorno
7) Definir la estrategia terapéutica oncológica especifica para usted y su tumor
8) Comunicar el riesgo de los tratamientos seleccionados
9) Cumplir con las normativas científicas y éticas hacia el paciente con cáncer
10) Evaluar los resultados de los tratamientos elegidos
11) Decidir no tratar cuando el paciente tiene un cáncer terminal
12) Derivar a superior nivel de atención oncológica para tratamientos de investigación
A continuación les detallo cada uno de estos pasos…”
“CUARTA ETAPA: EVALUACIÓN Y SEGUIMIENTO ONCOLÓGICO DEL PACIENTE TRATADO
Logrado el objetivo de aplicar una estrategia terapéutica, al finalizar la misma debe evaluarse si la enfermedad quedó bajo control o no. Esto se hará solicitando los estudios pertinentes y chequeando el estado general del paciente. Se arribará entonces a estas posibles situaciones generales:
- El cáncer desapareció o disminuyó
- El cáncer avanzó
- El cáncer se estabilizó…”
